el blog de reseñas de Andrés Accorsi

miércoles, 23 de marzo de 2011

24/03: LAS AVENTURAS DE FEDE Y TOMATE Vol.1


Hoy la vida me hace trampa: al viajar de Oeste a Este, voy a tener un día de 22 horas. Yo respondo con más trampa aún: todavía estoy en Perú, donde son recién las 10 de la noche del 23, y aprovecho el ratito pre-salir de joda para leer un comic muy breve y postear una reseña también breve, como para zafar.
Las Aventuras de Fede y Tomate es un comic para chicos chiquitos, de hasta 8 ó 9 años. Se publica en un formato pequeño, aunque la extensión no es taaan breve: son 46 páginas de historieta. Claro, al ser páginas chicas, ninguna tiene muchas viñetas y eso es lo que hace que –en la práctica- no haya tanto para leer. Eso y el hecho de que, al ser historieta 100% infantil, los autores se cuidan de que haya poco texto en cada globo y pocos globos por página. Con todas esas limitaciones, estamos ante un cuento gráfico que va para adelante, con una presentación de personajes, el desarrollo de una situación y su resolución, todo hilvanado de forma clara y concisa, pero sin subestimar al lector.
El guionista de Fede y Tomate no es otro que Luciano Saracino, ese que asomara tímidamente en 2007 con King Cop y que desde entonces no paró de ganar terreno, tanto en la historieta como en sus tareas de literato e investigador en el área del cine fantástico y de género. La apuesta de Saracino en Fede y Tomate es a la imaginación: sabe que esto lo van a leer chicos que se imaginan mucho más de lo que viven, que acumulan muchas más experiencias a través de los dibujos animados y los libros de cuentos que a través de la vida misma. Chicos que, por supuesto, no se van a cuestionar hasta qué punto es absolutamente imposible que Fede y su gato hagan las cosas que hacen en este comic, sino que lo van a disfrutar desde la ilusión, desde el candor, desde el “dale que…”. El chico que lee la historieta no sólo quiere ser Fede: durante 46 páginas ES Fede, y eso es un enorme mérito del guionista.
La otra apuesta de Saracino es –me parece- a introducir a sus pequeños lectores en el mundo del relato gráfico al que llamamos historieta. Tal vez por eso mete -uno atrás del otro y sin guardarse nada- globos de diálogo, globos de pensamiento, bloques de texto, onomatopeyas, imágenes que reemplazan a los textos dentro de los globos y demás metáforas visuales que el chico decodifica naturalmente mientras aprende –sin darse cuenta, claro- a leer el alucinante idioma del comic. La “docencia” de Saracino es sutil y efectiva: lo comprobé con mi sobrino de cuatro años y medio, que no sólo leyó varias veces el librito de Fede y Tomate, sino que entendió todo y de ahí en más se animó a leer otras historietas.
Pero el gancho en un comic para chicos es siempre el dibujo y ahí es donde resulta fundamental el enorme esfuerzo de Gerardo Baró, un autor que viene de la ilustración, pero que trae a cuestas un incuestionable amor por el Noveno Arte (y si no, chequeá sus trabajos en el blog Vivo con mi Madre). Baró, además de narrar todo con extrema claridad, tiene que contar un comic de acción sin dibujar violencia y tiene que transmitir sensaciones de peligro sin dibujar nada tétrico ni escabroso. Explicame cómo se hace eso… Bueno, Baró me lo explicó en estas páginas. Y además tenés que dibujar lindo. Incluso los malos tienen que ser redonditos, espumosos, amistosos. Y ahí Baró se zarpa: su diseño de personajes es 100% ganchero, muy atractivo para el ojo infantil acostumbrado al dibujo animado, bastante cercano en estilo al de un montón de ilustradores de cuentos para chicos, pero a la vez personal, sin olor a clon ni a refrito. Los colores, las texturas, los planos que elige para contar, su forma de trabajar la línea cinética, todo parece obra de un tipo que tiene 130 historietas publicadas y hasta donde yo sé, esta es la primera.
Si querés quedar como un duque con un niño, y de paso corromperlo para que se una al lado oscuro de la Fuerza, Las Aventuras de Fede y Tomate son una gran opción. Si además llegás a leerte la historieta de keruza, en un viaje en bondi, o en una pausita de 10-15 minutos, te vas a ver transportado a esas mágicas tardes de la infancia en las que todo podía suceder y estabas dispuesto a creer en cualquier cosa que te sacudiera la modorra de estar muy al pedo en tu casa. No sé si te emocionará a pleno, pero seguro te va a hacer pasar un lindo rato.

3 comentarios:

gonzalo dijo...

¿Sabes cuanto cuesta? Lo quiero comprar pero para mi, y me cuesta dejar la billetera en una librería por algo que voy a tardar 5 minutos en leer, pero le tengo toda la fe a que debe ser genial.

Andres Accorsi dijo...

El precio -por lo menos en comiquerías- es de $ 32.

noticias dijo...

guaaa!! me encanta el blog, siempre encuentro temas muy interesantes.