el blog de reseñas de Andrés Accorsi

lunes, 10 de enero de 2011

10/ 01: JLA: SECRET SOCIETY OF SUPER-HEROES


Me estoy poniendo al día con varias cosas de DC que ya tienen unos cuantos años, pero que no había leído nunca. En este caso, me toca una miniserie de dos libritos prestige aparecidos en 2000 y con el recordado sello Elseworlds, el de las realidades alternativas en las que los personajes clásicos aparecían reversionados en historias que jamás podrían encajar en la continuidad habitual (si es que ese concepto se le puede aplicar al Universo DC).
Acá, el maestro Howard Chaykin y su eficiente esbirro David Tischman nos proponen un mundo en el que los superhéroes jamás salieron a la luz. Existen desde fines de los ´30, pero siempre operaron de keruza, como una secta clandestina dedicada a impartir justicia desde las sombras. Por supuesto, si sos poderoso y nadie te ve, tenés garantizado un altísimo grado de impunidad hagas lo que hagas, y ahí está lo más interesante del planteo: una facción de los héroes (liderada por Kyle Rayner) aprovecha los poderes para ganar fortunas a espaldas de la otra facción (liderada por Clark Kent) y en algún momento estalla una Civil War, pero por guita. En el medio, se desarrollan dos tramas paralelas, cada una impulsada por uno de los dos protagonistas de la obra: por un lado Bruce Wayne, agente del FBI, investiga la desaparición de más de 300 criminales que se evaporaron entre 1939 y 2000 y la pista lo lleva, obviamente, a la sociedad secreta. Por otro lado, conocemos a Bart Allen, un chico con superpoderes, que es detectado por los héroes e invitado a unirse al grupo. Bruce y Bart son –por afano- los personajes mejor trabajados, cuyos entornos y motivaciones más exploran los guionistas.
Las tres puntas confluyen en el climax de la saga: Bart entra al grupo, Bruce descubre todos los secretos de la logia (y algunos más, que tienen que ver con su padre) y los héroes que responden a Superman (Metamorpho, Wonder Woman y Hawkgirl) se terminan cagando a trompadas con los que lidera Green Lantern (Flash, Atom y Plastic Man) en un combate bastante sangriento donde el mundo finalmente se entera de la existencia de estos tipos. No está mal, es un trámite entretenido, con algunos momentos copados (la relación entre Bruce y Lois Lane, por ejemplo), frases mortales (Bruce tira un “¿Cómo puede ser que cuando desenmascarás a un villano en el mundo real NUNCA te encontrás con una cara conocida?”) y usos muy ingeniosos de los poderes (Atom intefiere conexiones entre computadoras para alterar los números de la bolsa). Pero también hay varias secuencias al pedo, básicamente todas las de la Zona Fantasma, y ese epílogo de Catwoman que no va a ningún lado. Lo bueno es que cada secuencia suele durar una sóla página, entonces te tienen casi 100 páginas a los saltos: de Gotham a la Zona Fantasma, de ahí a la casa de Bart en Keystone, de ahí a la redacción del Planet, de ahí a la guarida de la logia, a la bolsa de Hong Kong, a Washington D.C., o al Arkham Asylum. Recién sobre el final hay secuencias de más de seis páginas.
A cargo del dibujo lo tenemos a Mike McKone, todavía lejos de sus mejores laburos (Exiles y Teen Titans), pero en un nivel bastante digno. Las tintas de Jimmy Palmiotti lo deforman un poco (así vemos un par de caras de Diana verdaderamente pesadillescas) pero no opacan la principal virtud de McKone, que es la solvencia narrativa. Los colores del glorioso Dave Stewart, por supuesto, le dan un plus valiosísimo a toda la faz gráfica.
Secret Society of Super-Heroes no entra ni por accidente al panteón de los Elseworlds fundamentales, pero se deja leer gracias a su gran ritmo y a un par de ideas osadas y novedosas, de esas que Chaykin suele desperdigar con generosidad en casi todos los guiones en los que mete mano. Interesante.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La premisa y lo que contás está muy bueno, la verdad. abrazo! Colo